Esta pregunta es muy simple, y sin embargo la respuesta es de una complejidad asombrosa. Para empezar, el ser una persona segura o no depende mucho de uno mismo; así que, si una mujer embarazada ya cojea de ahí, la cosa se complica aún más. Para colmo, se entra en un espacio de nueve meses donde todo es desconocido, y donde a veces, cuando te quieren aconsejar mujeres que ya han sido madres, la ayuda puede ser peor que la total indiferencia.
Por definición, un embarazo, y más si es el primero, es un época de incertidumbre. No puedes planear nada por adelantado, por mucho que te sepas de memoria las etapas de la época de gravidez. Si tienes esto en cuenta, puede que la angustia de no tenerlo todo bajo control no sea tan grande: no estás sola en esto, todas las futuras madres han pasado por ello. La buena noticia es que sobreviven a ello, tienen sus hijos, y muchísimas de ellas repiten, ¿no te hace eso sentir mejor?
El mundo de los bebés es apasionante, no hay duda; sin embargo, plantéate esto: aún no estás en esa etapa. El buscar mucha información sobre el parto, el postparto y los primeros días de crianza te causará inseguridad, pues para nada de eso podrás hacer planes. Sé que es superior a una embarazada el querer saber sobre lo que le espera, pero no te pierdas este consejo: céntrate en el ahora y el futuro muy próximo, eso te hará mantener algún control sobre la situación, y no te causará tanta zozobra.
Luego, siempre he pensado que es importante recordar que, en unos meses, vas a ser madre y todas tus fuerzas, pensamientos y atenciones estarán enfocadas en tu bebé; así que ¿por qué no dedicar estas semanas previas a ti como mujer? El estar embarazada no tiene por qué ser una razón para descuidarte, ni a ti misma ni a nada de lo que te guste.
Seguir con tus hobbies en la medida de lo posible te hará mucho bien, por no hablar de tu cuidado persona. ¿Por qué no darse un homenaje en un spa, tener una sesión de cosmética, o incluso irse de shopping para conseguir un nuevo guardarropa?
La ropa para premamás es un sector que ha dado un gran vuelco en los últimos años, creando casi una industria propia.
Y es que el aspecto físico es un factor muy importante para la mujer embarazada, que incide directamente en su salud emocional. Si una mujer se siente bien por fuera, es mucho más probable que lo haga también por dentro, o al menos que sea una ayuda. Y no podemos olvidar lo que el embarazo hace al cuerpo de la futura mamá: cambios en la piel y el cabello, redondez del vientre, hinchazón de manos y pies… Todo esto es inevitable, por eso ayuda mucho el llevarlo lo mejor posible haciendo todo aquello que te haga sentir bien. ¿A qué mujer no le gusta ir de compras?
Y si acaso no te gusta, no tienes que preocuparte. No es necesario que te patees media ciudad para conseguirte el guardarropa nuevo que necesitarás. En la actualidad existen numerosas tiendas online para premamás, con los diseños más punteros en lo que se refieren a moda. También añaden un servicio de asesoramiento, cosa de agradecer cuando una es nueva en estos menesteres. Y lo mejor, precios asequibles, entrega a domicilio y devoluciones gratis en la gran mayoría. Así ¿quién se resiste a una jornada de compras para embarazadas?